El compositor tailandés Daniel Ryn explora el destino y el agotamiento en su nuevo EP Fortuna Fader. Como primera entrega del ciclo de álbumes sobre el horario de verano, Fortuna Fader condensa los temas centrales del álbum en una introducción poética y minimalista. El título sugiere que el destino se nos escapa de las manos y que el agotamiento es la protesta del cuerpo.
Musicalmente, Fortuna Fader combina texturas lo-fi, voces suaves y arreglos sutiles, diseñados para una sensación personal pero a la vez espaciosa, íntima pero expansiva. El EP incluye tres temas: «Struggling To Come Back», «Exit Beach Music» y «Nothing’s Not The Same». Cada tema es una reflexión sobre el colapso sutil, interpretado con moderación en lugar de dramatismo. El lanzamiento es minimalista y narrativo, anclado en una identidad visual cohesiva y una narrativa conceptual que lo atraviesa todo el EP.
«Struggling To Come Back» es una representación sonora de la autorecuperación como un proceso silencioso y sin glamour. La canción explora temas como el agotamiento, la inercia personal y el estancamiento emocional, con tonos lo-fi y melancolía nocturna, con influencias de Clairo, The Sundays, Damon Albarn y Lou Reed.
«Exit Beach Music» refleja el fin del escapismo; el bajón emocional tras los subidones sintéticos. Capturando el alivio de sentirse mejor tras un subidón desagradable, la canción combina tonos deslavados, ambientales y melancólicos, con influencias de The Sundays, Eyedress y Mac Demarco.
«Nothing’s Not The Same» ancla el EP en una comprensión silenciosa, en lugar de una transformación dramática. Con influencias de Tyler the Creator, WIM y la música de género bossanova, la canción tiene un tono más groovy en comparación con las otras canciones. «Nothing’s Not The Same» es un guiño poético a la paradoja del cambio: que, aunque todo parece estar en constante cambio, ciertos patrones emocionales y recuerdos nunca cambian del todo. Como dice la cita: «Aunque las cosas siempre están cambiando, algunas cosas siempre son iguales».
Daniel Ryn es un artista y compositor multidisciplinario residente en Bangkok, cuyo introspectivo indie pop surge de las sesiones entre las pruebas de sonido y al cierre de la tienda. Tras fundar varias de las salas de música más prestigiosas de la ciudad, ahora se centra exclusivamente en Melt Livehouse, un espacio con capacidad para 700 personas que promueve el talento regional.
La obra de Ryn combina memoria, estado de ánimo y contención, escrita en los tranquilos márgenes de una vida dedicada a la selección de sonido y actuaciones en directo en su sala. Con Fortuna Fader, abre las puertas a escenas locales, listo para girar y compartir su música con públicos mucho más allá de su ciudad natal.
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